El presidente de la Cámara de Distribuidores de GLP dice que la comisión se mantiene desde hace casi 20 años y la situación de las empresas es insostenible. Algunas recortan personal o usan menos camiones.
La Cámara de Distribuidores de Gas Licuado de Petróleo (GLP) alertó la insostenibilidad del sector y demandó al Gobierno un incremento en la comisión por garrafa vendida.
El presidente de la institución, Fernando Segovia, dijo que muchas empresas están afectadas debido a la crisis económica del país, por lo que necesitan una nivelación en la comisión que reciben por garrafa vendida en el país.
“Lo que nosotros hemos pedido es que se revise el tema de la comisión, revisar los mecanismos por los que se puede incrementar esa comisión. La comisión es el monto de dinero que se recibe por cada garrafa vendida. Es un monto fijo hace 18, 20 años, necesitamos que eso se actualice”, dijo el dirigente en radio Fides.
El noviembre del año pasado, el sector ya se movilizó exigiendo el incremento en la comisión. En esa oportunidad, indicaron que el distribuidor de GLP tiene una ganancia de Bs 0,14 centavos por garrafa que vende, que se aplica desde 2018.
GLP
Explicó que la situación es complicada y diferente en cada empresa dependiendo de la estructura de costos. En el caso de las más grandes, debido a la crisis, muchas están reduciendo camiones distribuidores y personal; en cambio en las más pequeñas están optando por recortes en el personal.
“Estamos en un tiempo complicado, empezando el invierno y lo que menos queremos preocupar al ama de casa, que piensen que se va cortar el servicio. Lo estamos haciendo de manera normal, estamos en análisis con los asociados para ver la situación económica de cada empresa”, complementó.
Según cifras de la Cámara, hasta el año pasado, había registro de al menos 150 empresas y unas 10.000 familias que viven de la venta de GLP.
Otro problema es la falta de combustibles. En el país se envasan aproximadamente unas 138.000 garrafas y el 65% se distribuyen en el eje troncal. El 90% de los camiones funciona con diésel y no hay carburante suficiente para que cumplan con sus rutas, pese al compromiso de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB).
En el país cada garrafa de GLP se vende en Bs 22,50.
Fuente: La razon
