El  BID ha señalado que el año 2014 el 59% del aumento neto de capacidad energética del mundo procedió de las renovables. Sin embargo, las principales limitantes en este sector continúan siendo la baja  eficiencia de transformación de la energía solar, bio y eólica en eléctrica, así como las condiciones de los sistemas de almacenamiento de dicha energía, de acuerdo a Gastón Mejía, jefe de la carrera de Ingeniería Petrolera de la UPSA.
Considera que esta situación sería más complicada aun en el caso de la energía solar, puesto que encarecen el costo de disponibilidad de potencia generada y la falta de incentivos para que sectores privados y la comunidad contribuyan al Sistema Integrado Nacional (SIN), con energía eléctrica proveniente de sistemas de energías alternativas, como sería el caso del Ingenio Guabirá, en Santa Cruz.

El análisis de Mejía, centrado en la realidad boliviana agrega que, sin embargo, estas presentan un avance importante  en el marco de la Agenda 2025 adoptada por el Gobierno de Morales que se expresa en la construcción y puesta en operación  de sistemas de generación electro fotovoltaicos-uno de ellos  en operación en Pando-, parques eólicos, generación geo eléctrica en Potosí y la construcción de plantas hidroeléctricas en Beni, Cochabamba, La Paz y Santa Cruz, en busca de cambiar la matriz energética.

Reconoce, en este marco, que existe, en un país con una economía fuertemente “gasificada”, una mayor incidencia en energías limpias y en el acceso a energía eléctrica para  todo habitante boliviano  en cualquier parte del territorio para el año 2025, al margen de contribuciones puntuales  en el área rural que realizan algunas instituciones y organizaciones nacionales e internacionales.

En este marco, refiere que la solar cuenta con importantes perspectivas por presentar todo el territorio de Bolivia un alto grado de insolación (entre  4,5 Kwh/m2-día a  6 Kwh/ m2- día), destacando la región oriental frente a las potencialidades también considerables del occidente del país, especificando que esto se traduce en  el doble  de la energía que reciben, en superficie, países como España y Alemania que presentan un significativo desarrollo de energías alternativas en Europa.

Esta lectura, que también toma en cuenta la actual crisis de los precios de los hidrocarburos, remarcando que su abaratamiento está incidiendo en la postergación y paralización de proyectos importantes en materia de energías renovables por el mayor costo de Kilowatt generado; no invisibiliza, empero, el hecho de que el año 2014 ha habido un aumento neto de su capacidad energética a nivel mundial, en un mundo fuertemente gobernado por los combustibles fósiles en materia de generación energética.

Ratificando esta tendencia, Renán Orellana, consultor del BID, sostuvo en el marco del Seminario Internacional “Oportunidades para las Energías Renovables en Bolivia”, realizado en julio de 2015 por ENERGÍABolivia, que la capacidad de energía solar fotovoltaica ha verificado un gran crecimiento y se ha multiplicado 48 veces entre el 2004 (3,7GW) y el 2014 (177GW), incluyendo a países de América Latina y el Caribe, lo que sin duda nos muestra esfuerzos a favor de preservar, de mejor manera, la sostenibilidad del planeta.


FUENTE: EL DÍA