COLUMNA TEMAS

¿Somos un país patético?

2020-06-12 00:43:54 / EL DÍA

¿Desaparecer al hombre en aras del progreso?

2020-05-13 20:06:15 / EL DÍA

El ser humano, una triste paradoja

2020-04-27 13:59:08 / EL DÍA


Ver más notas

Asunción. Diferentes reportes emitidos por el Centro de Operaciones y Control (COC) de la central hidroeléctrica de Yacyretá (CHY), que datan de los años 2012, 2013 y 2014, indican que las unidades del parque generador han sido sobreexigidas para satisfacer la demanda del Sistema Argentino de Interconexión (SADI).

En uno de los documentos, de fecha 9 de enero de 2012, entre las novedades se indica que a las 10:01 el “COC solicita excepcionalmente generación adicional por emergencia en el SADI”. Más tarde, a las 12:26; nuevamente se lee que el “COC solicita excepcionalmente generación adicional hasta las 15:00, aproximadamente”.

Los registros de potencia de ese día registran una variación aproximada de entre 200 MW a 250 MW, que corresponden a las diferencias de generación por la potencia adicional inyectada al sistema argentino.

En otro informe, correspondiente al 16 de enero de 2014, se observa además de la generación de potencia extraordinaria, los servicios de regulación de frecuencia que son requeridos por el SADI. En dos horarios, considerados como los de mayor carga; a las 13:18 y luego a las 20:01, son requeridas potencias extraordinarias en torno a los 200 MW, a solicitud del COC. Incluso, una comunicación de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico SA (Cammesa), avisa sobre un pedido de potencia extraordinaria desde la hora 10:00 hasta las 24:00.

Técnicos paraguayos de Yacyretá afirmaron que con esto se demuestra que la sobreexigencia a las máquinas fue una constante en los últimos años y lo que es peor, todo fue realizado con el consentimiento de las autoridades paraguayas. “El tema acá es que de acuerdo a la necesidad del pueblo argentino, nuestras autoridades han permitido que estas máquinas sean sobreexigidas. Hay una indicación de la Voith que es la fabricante, donde señalan que la capacidad máxima de generación es de 135 MW, pero acá ante la crisis energética y la necesidad del pueblo argentino, se han llevado a sobreexigir las máquinas forzándolas”, afirmó Lorenzo Ramírez, secretario del Sindicato del departamento Técnico de la EBY.

Deben pagar por los daños

Según indicaron los técnicos, dentro de las actuales negociaciones con Argentina para la revisión del Anexo C se debería definir también el pago a Yacyretá por los servicios técnicos que el Sistema Argentino de Interconexión Eléctrica (SADI) requiere de las máquinas de Yacyretá, que son: reserva operativa de potencia, reserva de potencia a corto plazo, servicio de regulación primaria de frecuencia, regulación secundaria de frecuencia, entre otros.

A todo esto se suma el costo del mantenimiento y reparación de las máquinas averiadas.

FUENTE: AMERICA ECONOMÍA