La petrolera argentina Pluspetrol anunció este jueves el retiro de sus equipos de una zona en disputa con pobladores de la selva central del país, luego de que el Gobierno lo pidiera y anunciara la evaluación de una operación que ha generado protestas que dejaron un muerto y decenas de heridos.

Los pobladores del distrito Pichanaki, en la región selvática de Junín, iniciaron una protesta el lunes y un día después se produjo un choque con la policía en una manifestación contra la empresa por el temor de que contamine la zona.

"En los próximos días, la empresa procederá a sacar el material logístico restante que se encuentra en esta localidad, toda vez que existan las condiciones de seguridad necesarias para hacerlo", dijo Pluspetrol Perú en un comunicado.

El ministro de Energía y Minas, Eleodoro Mayorga, anunció más temprano en Pichanaki el pedido para que Pluspetrol deje en tres días su operación en la zona, en el inicio de un diálogo con cientos de pobladores en una plaza pública de la localidad.

Pluspetrol firmó en el 2005 un contrato de licencia con el Estado peruano para desarrollar el lote 108, una franja rectangular de 1,2 millones de hectáreas en Junín, donde sus pobladores viven generalmente de cultivo de café y cacao.

"Ese contrato hay que evaluarlo, primero me gustaría saber de los avances que ha tenido, si han sido hechos con todos los permisos, con todas las licencias que este tipo de trabajo requiere", afirmó Mayorga en la zona en declaraciones transmitidas por la televisión estatal.

Pluspetrol dijo que sus actividades en el lote 108 cuentan con todos los requisitos legales, ambientales y sociales para continuar los trabajos exploratorios en la zona; además acuerdos con 34 comunidades nativas y más de 2.000 acuerdos particulares con agricultores, así como el apoyo de las autoridades.

La compañía dijo que desde setiembre del año pasado Pluspetrol no realiza actividad alguna de exploración en la zona de Pichanaki, en donde solo se tenían almacenados algunos materiales necesarios para realizar sus operaciones.

"Pluspetrol continuará sus actividades en el Lote 108, de acuerdo al Contrato de Licencia otorgado por el Estado", dijo.

Tras el diálogo del Gobierno en Pichanaki, los pobladores de suspendieron su protesta hasta el 19 de febrero y se crearon grupos de trabajo para atender demandas sociales de la zona.

Pluspetrol bajo fuego

Unos 500 manifestantes ingresaron violentamente el martes a una instalación de Pluspetrol en Pichanaki -ubicado en un terreno del Ejército cedido a la empresa- y destruyeron y dañaron maquinaria y equipos de la firma, dijo el Gobierno.

La incursión generó un enfrentamiento con la policía que terminó con la muerte de un joven de 22 años, tras recibir un impacto de bala en el abdomen, según autoridades de la zona.

La policía dijo al inicio que no usaron armas de fuego en el choque, pero en un comunicado emitido el jueves informó que según investigaciones preliminares algunos agentes hicieron uso de armas letales, por lo que determinarán responsabilidades.

La protesta en Pichanaki es un nuevo foco de conflicto que enfrenta la petrolera Pluspetrol en el país andino.

Desde fines de enero cientos de indígenas de una localidad en la selva norte, en la región amazónica de Loreto, mantienen paralizado parcialmente el mayor lote petrolero de la compañía en Perú en demanda de una compensación por uso de sus tierras.

Analistas afirman que el problema de Pluspetrol es el manejo de pasivos ambientales en Loreto, que se generaron desde hace más de cuatro décadas cuando lo tenía la firma Occidental de Estados Unidos y pasó en el 2001 a manos de la firma argentina.

"Lamentablemente los pasivos en Loreto desde hace años le están pasando la factura en el lote de Pichanaki", dijo a Reuters el ex presidente de la estatal PerúPetro, Aurelio Ochoa.

El lote 108 es considerado clave -según expertos- pues tendría una reserva de gas igual o superior al campo de Camisea, operado por Pluspetrol en la selva sur del país, que abastece gas para producir la mitad de la energía eléctrica de Perú.

Esta semana, el gerente de asuntos gubernamentales de Pluspetrol en Perú, Daniel Guerra, dijo a Reuters que en Pichanaki sólo realizaron trabajos de exploración básica. Afirmó que no están extrayendo ningún tipo de hidrocarburos y por tanto no hay ninguna posibilidad de derrame de combustible.

La explotación de recursos naturales en Perú es foco de constantes conflictos sociales por parte de comunidades nativas y pobladores que acusan a las empresas de no respetar sus tierras o de contaminar las zonas donde viven.

La inversión en estos sectores claves se ha frenado en los últimos años en parte por estos conflictos. Perú tiene en cartera al menos 60.000 millones de dólares en proyectos mineros y energéticos para los siguientes años, según el Gobierno.

FUENTE: americaeconomia