En un comunicado enviado a ENERGÍABolivia, Repsol confirma que el proyecto Margarita-Huacaya continúa siendo relevante para la compañía que también está desarrollando actividades de exploración tanto en sus áreas operadas como no operadas, a través de YPFB Andina.

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Con una inversión estimada de 175 millones de dólares, el objetivo es que el Margarita 7 y el Margarita 8 entren en producción durante el primer trimestre de 2015, señala la comunicación ofrecida por Repsol Bolivia.En este escenario, Margarita-Huacaya continúa entre los diez proyectos estratégicos desarrollados por Repsol a nivel mundial. Según la empresa, la producción actual supera los 15 millones de metros cúbicos diarios de gas y afirma que está desarrollando actividades para garantizar los volúmenes de gas comprometidos en el marco del contrato suscrito con Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB).

Informa que en octubre de 2013 se concluyó la ampliación de la planta y la construcción de nuevas líneas de recolección, además de poner en producción el pozo Margarita 5. A fines de diciembre, se sumó el Margarita 6, el que durante las pruebas de producción se convirtió en el pozo de mayor caudal de la cuenca Subandina con 6,4 MM3D. Actualmente produce 4 MM3D en el marco de un adecuado manejo del yacimiento.

En este escenario sostiene que en la actualidad continúan los trabajos de desarrollo. La perforación de dos pozos avanza dentro de lo planificado. El objetivo es que el Margarita 7 y el Margarita 8 entren en producción durante el primer trimestre de 2015.

La empresa explica que la inversión estimada para ambos es de 175 millones de dólares y que en el Margarita 7 el objetivo es llegar a los 4.750 metros de profundidad y realizar la completación hasta diciembre. De esta forma, el pozo podría estar listo para ingresar en producción a fines del primer trimestre de 2015.

“El objetivo en el MGR 8 es alcanzar los 4.500 metros de profundidad y la perforación debería concluir en diciembre de este año. También se estima que pueda ingresar en producción a fines de marzo del próximo año”, acota.

Asegura que en los campos Paloma y Surubí, otra de las áreas operadas por Repsol Bolivia, también se está trabajando para aumentar la producción de líquidos y este año la inversión rondará los 38 millones de dólares.

Consultada por ENERGÍABolivia sobre sus actividades en exploración, la compañía señala que en el área de Contrato Caipipendi están finalizando los trabajos de sísmica 2D y agrega que los datos se sumarán a los obtenidos durante los trabajos de sísmica 3D y que permitirán establecer nuevas perspectivas de desarrollo al norte y sur del área.

“En estos trabajos se ha contado hasta con 1.300 personas simultáneamente y en conjunto, demandaron aproximadamente un año. De esta forma, la compañía está desarrollando actividades de exploración tanto en sus áreas operadas como no operadas, a través de YPFB Andina”, dice.

La empresa da cuenta que seguridad y medioambiente son prioridad en la actividad diaria de Repsol Bolivia y asegura que por ello, el trabajo se desarrolla aplicando los mayores estándares de la industria y se refleja en las operaciones que se desarrollan en Tarija, Chuquisaca, Cochabamba y Santa Cruz.

“Esto forma parte de un sistema integrado de gestión (SIG) que parte de la Política de Seguridad, Salud y Medio Ambiente de Repsol que contiene los principios y valores esenciales de la compañía en cada una de sus actividades, así como también incorpora los requisitos legales vigentes y los requisitos de las normas de referencia”, anota.

Indica el comunicado que un elemento central de esta política es el liderazgo y compromiso que debe asumir cada uno de los integrantes de la compañía y explica que hay un trabajo permanente para generar comportamientos y hábitos seguros, que a la larga permiten establecer una cultura de seguridad dentro de la compañía.

Considera que los beneficios se dan en el corto, mediano y largo plazo, que se reflejan en indicadores de seguridad por debajo de los de la industria a nivel mundial.

“Una muestra de ello fue el desarrollo de las fases I y II del Proyecto Margarita-Huacaya, donde completamos más de 19 millones de horas hombre de trabajo con indicadores de seguridad comparables con los mejores de la industria a nivel mundial”, asegura a tiempo se señalar que la empresa ha implementado varias acciones tendentes a reforzar las conductas preventivas en materia de seguridad dentro de la empresa.

Indica que en materia ambiental el objetivo es mitigar el impacto de las actividades para lo cual se realizan estudios del área antes de iniciar los trabajos explicando que se desarrollan diferentes actividades como el tratamiento de suelos empetrolados a través de la técnica del landfarming.

“También se realiza la reforestación de las zonas en las cuales se ha realizado alguna intervención, como por ejemplo en la construcción de los ductos”, dice al asegurar que en esta línea se trabaja junto a la comunidad, que produce plantines de especies nativas y luego participa en la reforestación.

En el marco de lo que es el respeto y observancia de los derechos de los pueblos indígenas, Repsol indica que cuenta con una Política de Relaciones que la compromete con el respeto y observancia de los derechos de estos pueblos así como con la observancia de la legislación, los tratados y acuerdos internacionales existentes

“Repsol es consciente de los impactos, positivos y negativos, así como de las oportunidades que puede crear para que las comunidades indígenas participen y se beneficien de las actividades vinculadas a los proyectos hidrocarburíferos, las que pueden contribuir a su desarrollo económico y social, mejorando sus condiciones de vida”, señala.

Finalmente, indica que Repsol Bolivia ha adoptado una visión de responsabilidad corporativa que marca como prioridad una acción integral que responda a las expectativas de sus diferentes grupos de interés, que contribuya al desarrollo sostenible y que permita generar actividades productivas proyectadas en el largo plazo, entre otros objetivos.