Opinión - Temas
Miércoles, 30 de Mayo, 2012

En medio de la crisis económica y social que vive Europa, este mes se ha creado en Bruselas el Consejo Mundial de Energía Solar con el objetivo de ampliar el despliegue global de esta energía dentro del mix energético, a precios competitivos y de forma sostenible, de acuerdo a una nota del portal www.globalsolarcouncil.net que ratifica los esfuerzos que se desarrollan a favor de las energías alternativas en momentos cuando los combustibles fósiles, como el petróleo y el gas, no han dejado de sustentar la actual matriz energética que mueve desde la industria hasta los últimos adelantos tecnológicos como las TICs.

En efecto, si se revisa, con criterio técnico, el derrotero de los avances industriales -incluyendo los tecnológicos-, no es difícil advertir que su mayor sustento fueron y continúan siendo los combustibles fósiles, conocidos como recursos naturales no renovables, explotados en distintos lugares del mundo en base a tecnología sofisticada y costosa. De ahí la importancia estratégica de Bolivia en el concierto de naciones y la urgencia de negociaciones también estratégicas al respecto.

Actualmente, y en honor a la verdad, gran parte de la generación eléctrica en el mundo, no ha logrado desligarse del motor de combustión interna, propulsado precisamente por combustibles fósiles y, decir lo contrario, es contribuir a la confusión sobre el real estado de situación de la matriz energética y sus transversalidades políticas y económicas.

Con todo, conocer noticias que hablan de un fortalecimiento de las energías renovables, como la solar, no deja de ser alentador principalmente si se pasa revista a las consecuencias de la Segunda Revolución Industrial sobre el medio ambiente, especialmente en los océanos, donde se ha depositado importantes cantidades de desechos de estos avances industriales y, sobre todo, si se advierte que este desarrollo puede favorecer la depreciación de algunos insumos tecnológicos.

Es decir, si estas iniciativas favorecen, por ejemplo, el abaratamiento y eficiencia de las células solares que hacen parte de los paneles solares, sin duda que es una buena noticia, también para Bolivia, porque esto supone abaratar costos para la fabricación de estos paneles y utilizarlos como alternativa en la generación de electricidad.

Según Roland-Jan Meijer, el flamante Director Ejecutivo del Consejo, esta instancia “es una importante y oportuna iniciativa industrial” que estaría demostrando el firme compromiso de este sector “para continuar haciendo de la energía solar un éxito mundial".

En este marco, es necesario señalar que los avances de esta energía actualmente se encuentran en diversos experimentos que van desde las carreteras solares, hasta su vinculación con la nanotecnología que emerge, justamente, como un gran aliado de la tecnología solar para la creación de células solares baratas y con un rendimiento aceptable, según un informe divulgado por el portal www.ojocientifico.com.

Consiguientemente, no cabe duda de que la tecnología solar está avanzando aunque por el momento no sea lo suficientemente competitiva

ni tenga una repercusión significativa en la creación de fuentes de empleo. Sin embargo, parece estar cada vez más cerca de convertirse en una fuente de energía renovable y también ecológica, capaz de apuntalar y con solvencia, la obtención de energía eléctrica.

Acerca del autor:
Vesna Marinkovic U.

Fuente:
http://eldia.com.bo/index.php?cat=162&pla=3&id_articulo=92178