COLUMNA TEMAS

¿Somos un país patético?

2020-06-12 00:43:54 / EL DÍA

¿Desaparecer al hombre en aras del progreso?

2020-05-13 20:06:15 / EL DÍA

El ser humano, una triste paradoja

2020-04-27 13:59:08 / EL DÍA


Ver más notas
En entrevista con El Economista, Arturo Henríquez Autrey, nuevo director corporativo de Procura y Abastecimiento de Pemex, explica que primero se van sobre los contratos más grandes y cuyas necesidades se tienen más claras, como son los que tiene Pemex Exploración y Producción, y de ahí hacia abajo.

La creación de la Dirección Corporativa de Procura y Abastecimiento (DCPA) de Pemex permitirá ahorros inmediatos por 15.000 millones de pesos (US$1.114 millones), eliminará redundancias administrativas y gastos, además de que posibilitará aplicar prácticas de buen gobierno y transparencia. La meta es que en un par de años el control sea total y en todas las áreas de la petrolera.

En entrevista con El Economista, Arturo Henríquez Autrey, nuevo director corporativo de Procura y Abastecimiento de Pemex, explica que primero se van sobre los contratos más grandes y cuyas necesidades se tienen más claras, como son los que tiene Pemex Exploración y Producción, y de ahí hacia abajo.

“Ahorita hacemos más de 30.000 contrataciones al año, aproximadamente se compran US$ 30.000 millones, dependiendo el año”, indica.

La consolidación de compras se enfoca también en transparentar todos los contratos que firme Pemex, lo mismo los más pequeños que los más grandes y para ello van a integrar a todos los empleados que en este momento hacen esos trabajos. “Eso es parte del mandato del área”, aclara el funcionario.

“(Hoy) no estamos maximizando la compra, porque estructuralmente nos manejamos como cuatro diferentes empresas, independiente una de otra y el corporativo, y no necesariamente estas adquisiciones están interconectadas, lo que reduce la eficiencia del poder adquisitivo de Pemex”, añade el funcionario, nombrado al frente de la DCPA el pasado 17 de enero.

Los puntos más relevantes son que, de entrada, se van a lograr al menos ahorros por unos 15.000 millones de pesos al año, que se van a incrementar conforme se avance en la reestructura de la paraestatal y se tenga un mayor control sobre la misma.

En la nueva área se consolidan todas las compras, desde lápices y mobiliario hasta bombas y plataformas petroleras o tuberías, barcos y floteles, refiere.

“Primero tenemos que entender a través de categorías (cómo compramos), ésa es la mejor práctica de una empresa petrolera, tenemos que entender qué compramos”, afirma.

La nueva dirección es parte del proceso de reestructura de Pemex y lo que se busca es que los especialistas definan qué es lo que quieren, hacen una requisición de sus peticiones y es entonces cuando la DCPA interviene en hacer la investigación de campo y la licitación correspondiente.

Todas las compras van a pasar por esta oficina, estamos hablando de integrar cerca de 5.000 personas que hoy están divididas en los cuatro organismos de la paraestatal, aprovechar el poder adquisitivo mayor de la empresa al consolidar las compras de todas sus unidades.

“Tenemos mucho talento en Pemex que lo está haciendo (las compras), pero son operadores y tenemos que desligar la parte operadora de la parte contratante, el expertise está en Pemex, no se va, se va a fortalecer”, comenta.

Para saber cuáles son los mejores proveedores o bienes y servicios hay que hacer estudios de mercado y las bases técnicas y económicas, todo eso, excepto las bases técnicas, quedan en manos de la DCPA que incluso puede definir la estrategia de compras: licitación o adjudicación directa.

Credibilidad y transparencia. Henríquez Autrey reconoce la necesidad de mejorar la transparencia de las compras hacia afuera de Pemex.

Enfatiza que hay que entender la estructura de Pemex para realmente comprender cómo llegar a una estructura eficiente, transparente y clara, tomando en cuenta que hay más de 100 centros de compras, pero sin estandarización, porque hay muchos procedimientos que se hacen independientes, unos más objetivos que otros y otros más transparentes.

“No hay una gobernabilidad y rectoría sobre las compras y la idea es darle una rectoría y procedimientos a través de la gestión de procesos”, asevera.

El cronograma de la DCPA es flexible, no puede ser rígido, dice el funcionario. Se crea la DCPA que centraliza las funciones de las áreas contratantes de Pemex y en las áreas que incluyen en las compras hay un nuevo mando para todos ellos.

Se toman las direcciones de Suministros y la Subdirección de Proveedores más las gerencias de recursos materiales de los organismos subsidiarios. Las seis de Pemex Exploración y Producción, las dos de Pemex Refinación, la que tiene Pemex Gas y la que tiene Pemex Petroquímica.

Se inicia una labor masiva de integración, son cerca de 5.000 personas entre todos los organismos y el corporativo, se inicia la consolidación de compras en las partes sustantivas que son las que afectan la operación y para eso se van a tardar un lapso de entre 12 y 18 meses.

“No puedes agarrar todo de un golpe y pretender que porque hay una nueva línea todo va a fluir, la gente debe tener la certeza y seguridad en su trabajo y desempeño en lo que firma.

“Lo que estamos buscando es empezar a integrar lo que sea más relevante, fácil y que tenga mayor impacto porque, aunque estemos en una fase de integración, queremos dar casos de éxito de una manera inmediata”, concluyó.

Búsqueda de calidad, lo que no cambia. Con la creación de la Dirección Corporativa de Procura y Abastecimiento (DCPA) habrá un asunto que no cambia y es que los proveedores aún deben de convencer a los usuarios de que sus productos son los mejores y los que se necesitan para los proyectos de Pemex, dice Arturo Henríquez Autrey.

“Eso no va a cambiar, lo que cambia es cómo se contrata”, advierte.

Hoy el proveedor tiene que tocar varias puertas y el operador tiene que comprar; eso cambia, ahora la DCPA es quien compra y el operador hace su trabajo.

Pero también hay algo que se va a combatir y que tiene que ver con las malas prácticas.

“La mejor manera de deshacerse de las malas prácticas es teniendo procedimientos transparentes y objetivos y optimizando, es la mejor manera, es algo que debe de ir permeando a lo largo de una estructura que es más grande”, indicó.

FUENTE: AMERICA ECONOMIA